¡GRANDÍSIMA, MI QUERIDA PRESI!. "La operación se realizó sin inconvenientes ni complicaciones".

Se espera que el posoperatorio dure unas 72 horas y que el fin de semana CFK ya reciba el alta.

El vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, informó que la intervención quirúrgica, a cargo del equipo médico encabezado por el cirujano y oncólogo Pedro Saco, se extendió por tres horas y media, y, de acuerdo a lo previsto, se extirpó totalmente la glándula afectada por el carcínoma papilar. "La presidenta de la Nación presenta una buena recuperación, se encuentra despierta y recibirá los cuidados post operatorios en el área de internación general", indicó Scoccimarro, de acuerdo al comunicado de la Unidad Médica Presidencial. Por último, adelantó que la jefa de Estado permanecerá 72 horas internada y mañana al mediodía se dará el próximo parte médico.

Respaldada por los militantes kirchneristas que desde ayer realizaron una vigilia en el frente del centro médico ubicado en la localidad bonaerense de Pilar, la jefa de Estado había arribado a las 7 en el helicóptero presidencial que la trasladó desde la residencia de Olivos junto a sus hijos Máximo y Florencia.

Ayer, en su último día de actividad, Cristina recibió al vicepresidente Amado Boudou, que desde hoy y hasta el 24 de enero estará a cargo del Ejecutivo, además de a otros funcionarios y allegados, y siguió de cerca la situación en Río Negro y en Santa Cruz. Además de sus hijos, Máximo y Florencia, que permanecieron cerca de ella durante el día, también estuvieron en la quinta de Olivos el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zanini.

Aunque se sabe que durante el día de ayer terminó de ajustar las tuercas para que durante su ausencia todo siga tal cual lo planeó, los encargados de prensa aseguraron que todas las visitas que recibió en Olivos fueron “en calidad personal”.

Algunas versiones indicaban ayer que, tras consultarlo con otros especialistas, Saco habría decidido extirpar totalmente la glándula afectada, para reducir las posibilidades de que la enfermedad vuelva a manifestarse, sin embargo esto no fue confirmado oficialmente y habrá que esperar hasta que el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, lea el primer parte médico, después de la cirugía (se prevé que dure de tres a cuatro horas), para conocer los detalles de lo que pase en el quirófano.

De no mediar ningún imprevisto, CFK pasaría unas 72 horas internada, después de lo cual pretende viajar a El Calafate para completar allí los veinte días de licencia, durante los cuales deberá ser tratada con yodo radiactivo para eliminar cualquier célula peligrosa que pueda haberse desprendido. Sin embargo, si la UMP encabezada por Luis Buonomo aconseja lo contrario, la mandataria podría aceptar pasar las primeras jornadas en Olivos para monitorear la recuperación de forma más efectiva.

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“Cuando todo no es lo que parece”, columna exclusiva para la web del lunes 09/01/2011
Posted: 09 Jan 2012 04:32 AM PST

Hace unos años la pierna derecha dejó de responder. Estaba jugando al tenis. La sentí floja y entonces me fui a correr como para afirmarla. Caí dando pena debajo de la autopista por donde me desplazaba. Me puse de pie. Golpeé con el pie y, como si fuera un muñeco de trapo quedé en el cemento. De allí me fui al médico y me enviaron al Argerich para hacerme una tomografía computada. Me metieron en ese nicho abovedado y me tuvieron unos cuantos minutos. Al cabo, vi que miraban la pantalla con mucha atención. Que llamaban a otra persona con expresión de: “¿Qué te parece a vos?”. Uno de ellos avanzó hacia mi. Lo veo ahora como si fuera un astronauta caminando por la luna. “Creemos que tiene un tumor”, me dijo. “Benigno”, agregó. “Debemos ponerle un líquido para ver mejor en el contraste, ¿comprende?”. Era clarito. Lo que ocurrió en mi mente cuando me reubicaron en ese túnel cortado de las tomografías, es parte de una historia íntima.

Tengo respuestas personales de lo que se piensa cuando pensamos que nos vamos a morir nomás.

Cuando salí la reunión ya tenía unas seis personas frente a la pantalla. Me confirmaron que tenía un tumor. “Benigno”, insistieron tanto, que desconfié un poco y se los dije.

Salí, llame a mi casa y después a Adrián Paenza. ¡En cuantas historias mías está Adrián!

”No puede ser”, dijo Adrián, que es científico, pero tiene algunas expresiones de la gente común.”¿No puede ser qué Adri?”, pregunté.

”Tengo las placas, hay un punto negro que me mostraron al decirme que busque nefrólogo, como le dicen a un jugador al cabo de la temporada que se busque equipo”.

Adrián vino a buscar la placa con el propósito de hacer otra consulta. A la noche, exitado, llamó a mi casa: “Voy para ahí con un amigo”.

Era un jóven nefrólogo, creo que del Aleman, amigo de Adrián. Entraron con una sonrisa indigna ante la mirada de un tipo con tumor. Entendí de inmediato, en el abrazo del saludo de Adrián, como confesándome algo, que no era un tumor.

“No es ningún tumor, quedate tranquilo”.

Ahora me da vergüenza no recordar el nombre del médico y es muy temprano en Chicago para llamarlo a Adrián. Ese especialista vio que lo que parecía un tumor era una hernia de que operé unos pocos días más tarde en la Clínica Fleni, a partir del pronóstico correcto.

Cuando un error es al revés sólo debe procurarnos alegría.

Los títulos no deberían expresar ese llanto, que se advierte en algunos diarios, porque la Presidenta no está tan mal como les habían prometido los diagnósticos de la semana pasada.

Si quieren sumar alguna experiencia parecida la agradezco. Intuyo que hay unas cuantas.
Víctor Hugo

Victor Hugo Morales

¡¡¡Margarita, te pusiste al nivel de la Carriola!!! Qué tal si te dijéramos """la boca se te haga a un lao!!! No tenés perdón de Dios

¿Roa no lee Clarín?
Publicado el 10 de Enero de 2012
Por Marcelo Chiappano DNI 17727.237

Hace bastante tiempo que estoy enemistado con ese matutino que leo desde en mi casa desde que nací. Lamento no ser la cándida niña cuya madre no puede vivir sin Clarín. Hoy sigo leyéndolo, pero me he dado cuenta hace mucho que no alcanza leerlo solamente a él. Y de mucho antes que de este gobierno. Incluso mis primeras sospechas vienen desde la época del ’90, cuando leí en Corsa que Fontana (piloto de F-1) decía que el 1 a 1 era una mentira, que el peso se cambiaba (¡si es que te aceptaban pesos!) a $ 3 por dólar y me preguntaba cómo Fontana decía eso y el diario no se enteraba. Las diferencias fueron estirándose y hoy incluso hay veces cuando La Nación no me hace traducciones parciales más allá de la ideología, y Clarín sí, lo he comprobado. Pero Ricardo Roa, Editor General, parece no leer Clarín. Dice que la presidenta no debía ser intervenida y que esto podía ser una farsa para construir una épica falsa. De dónde Roa saca esos datos, quién lo asesora. Un piadoso olvido, porque más atrás, su periodista Valeria Román logra estos testimonios: “Los especialistas aseguran que igual no se pudo haber evitado la operación”, “El resultado siempre es provisorio hasta que lo confirme o lo descarte el estudio histopatológico posterior a la cirugía”, afirmó Alicia Gauna, ex presidenta de la Sociedad Argentina de Endocrinología. “No considero que haya ocurrido una equivocación por parte de los médicos: sabemos que hay falsos positivos”, opinó Eduardo Faure, jefe de la sección tiroides del Hospital Churruca-Vica. ¿Qué se puede esperar de un diario cuyo propio editor general no lee las notas? Hace mucho que la credibilidad, sangre necesaria de un medio de comunicación, ha sido salpicada por opiniones y decisiones como esas. Para que volvamos a creer en Clarín, hay gente que debería ver el daño que le hizo a sus lectores, a sus accionistas y a la esencia de un diario. Y apartarse antes que sea una caricatura del “Gran Diario Argentino”.

ISA:

En el mismo post puse mi insulto a Stolbizer, suponiendo (erróneamente) que Uds. habían leído su comentario. Y hablando de h... de p.... agregué una nota del infame de La Nación.
Y ya que estamos te agrego varios comentarios del 8 de diciembre en Página 12, entre los que encontrarás lo de la bruja carriolera y otros más
Para todos los gustos[/b
]Políticos y sindicalistas se pronunciaron tras el alta de la Presidenta. Algunos celebraron que no tuviera cáncer; otros cuestionaron que se haya dicho que padecía esa enfermedad.



- Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires: “Una alegría. Es algo que nos ha traído un alivio a esa angustia y esa incertidumbre que había producido todo esto. Pero la palabra de los médicos generó buenas expectativas que se consolidaron con este parte del día de hoy”.

- Juan Pablo Schiavi, secretario de Transporte: “Me da mucha alegría, estábamos seguros de que está haciendo el mejor tratamiento, quizás en uno de los mejores lugares del país. Cuando ella crea que está en condiciones y que no corre riesgo su salud, va a volver al trabajo, seguro”.

- Aníbal Fernández, senador por el FpV: “Gracias a Dios y a la buena onda de todos, CFK fue dada de alta y comienza un (corto) descanso en Olivos con excelente pronóstico de salud”.

- Ricardo Alfonsín, diputado de la UCR: “Nos alegra y tranquiliza a todos saber que la Presidenta no padece la enfermedad que suponíamos. Un saludo para ella y su familia”.

- Julio Piumato, líder de la Unión de Judiciales: “¡El mejor diagnóstico para el alta de la Presi! Ahora, a pensar en la justicia social plena. A paso de vencedores con Moyano, CGT y @CFKArgentina”.

-[b] Margarita Stolbizer, diputada de GEN: “No se puede hacer diagnóstico y comunicación oficial de cáncer y después decir que no era. ¿Nos están cargando? Muy poca seriedad”.

- Gerardo Milman, diputado de GEN: “Parece que el arma estadounidense no la alcanzó a Cristina, por suerte no tenía cáncer”.

- Laura Alonso, diputada del PRO: “¿El médico presidencial habrá estudiado en la misma escuela que Giselle Rímolo?”.

- Fernando Iglesias, ex diputado por la CC: “Ahora se dieron cuenta de que el cáncer de Cristina no era cáncer. ¿Cuándo se darán cuenta de que su gobierno progresista no es progresista?”.

- María José Lubertino, legisladora porteña por el FpV: “¡Qué bueno! Se recupera la Presi. ¡Descansá, @CFK Argentina!”

- Silvana Giudici, ex diputada de la UCR: “Hay algo que no comprendo. Si el tumor era benigno, ¿para qué extraer la tiroides? Hace tres años a mí me lo resolvieron con una simple punción”.

- Diego Kravetz, ex legislador porteño: “No entiendo a los que putean porque CFK no tiene cáncer. Si la noticia es distinta a la original, mucho mejor, por suerte. ¡Hagan política con otra cosa!”.

- Marta Varela, legisladora porteña del PRO: “Puede ser error de diagnóstico o afán de acrecentar la imagen de fortaleza que le gusta tanto. Cualquiera de las dos posibilidades: chantas. Suicidios que no son suicidios. Accidentes domésticos que son emociones violentas, que son asesinatos. Intendentes con trastornos psíquicos. Cáncer que no lo es. El ‘modelo’ se basa en el engaño”.

- Alejandro Tullio, director nacional electoral: “Deberíamos estar más tranquilos por la salud presidencial y no generar más polémicas por cuestiones de criterio científico”.